Carta Para mi Mama

Carta para mi mama.

Al principio iba a redactar algo más académico citando fechas y fuentes del “porque se celebra el días de las madres” y vos sabes mama que tengo un posicionamiento en contra de estos días que me parecen terribles y terroríficos por la gran carga manipuladora del sistema capitalista, machista y retrograda que alimenta las mentes de prácticas que posicionan  a la mujer únicamente como reproductoras para la crianza y limpieza de la casa. En síntesis, la cárcel de muchas aunque vivan en casas bañadas de oro tanto así que se ha convertido como en estatus de vida de la “mujer exitosa”

 “¡Soy madre! ¡Felicítame!”

Para mí,  y vos lo sabes, que nuestros encuentros de afecto son bastantes escasos, aunque nunca pude desprenderme de tu lado y deje de dormir acurrucado con vos a los 14 años teniendo mi cama.

Nuestros abrazos se han reducido a los 31 de diciembre en celebración al nuevo año y aún recuerdo ese mega abrazo de protección y consuelo que me diste cuando me descompensé en el entierro de mi adorado Adonis. Realmente somos bien fríos. ¡No se vale!

Pero de una cosa estoy seguro, y es que vos y yo nos amamos y hemos avanzado un montón en reconstruir lo que por años nos vino separando por cosas que se me han ocurrido y que han hecho que me aisle y sienta que nadie me quiera. Si, puede ser mi tema de la aceptación homosexual en mi adolescencia, que sin necesidad de crítica o desprecio (porque nunca lo hubo) y en mi mundo me lo vivía como la peor de las desgracias.

Sin embargo,  hoy en día esa cuenta esta saldada, sos una madre ejemplar que habla sin pelos en la lengua del orgullo que tenés sobre mí. En el frente de un foro de familias diversas, verte ahí en frente, empoderada hizo que yo sintiera que una de mis metas de vida fuese cumplida, esa plenitud que esperaba solo vos me la podías dar y lo hiciste. Estoy tan feliz y pleno en esta vida y todo gracias a vos el ser más querido para mí.

Reconstruir el tiempo perdido ha sido nuestro proyecto en común, en donde las dos aprendamos y nos cuestionemos, nos enojamos y a la vez nos sentimos mal de pelearnos y regresamos con el rabo entre las piernas regalándonos una enchiladita o un antojito de la calle.

Tan así somos, somos como los mejores amigos, sos mi mejor amiga.

Para este 30 de mayo con los últimos acontecimientos en este 2018, fíjate que se me ha despertado esa sensación de abrazarte, porque he sentido que mi cuerpo aún vive pero mi alma no, al ver a chavalos de mi edad morir, al estar curando heridas de bala, verlos sufrir e ir a velas y entierros de jóvenes asesinados y sus madres agonizando en dolor por las pérdidas de sus hijos.

Hoy más que nunca quiero abrazarte porque sé que en medio de la distancia necesaria por protección mi integridad física como la de la tuya y de la familia tengo que huir y alejarme hasta de la ciudad. Pero sabes que soy de los que siempre me involucraré en apoyo poniendo en prácticas mis conocimientos y habilidades además de esta lucha que he promovido en el llamado de los auto convocados y la libre espontanea participación por el rescate de esa Nicaragua que nos urge  para vivir prósperamente o simplemente vivir en tranquilidad.

Vos me despertaste la conciencia crítica y fuiste mi primera maestra de valores y civismo, de principios reales sobre la participación ciudadana.

Madre, ya sabes que el mejor regalo del día de las madres para los dos, es que, estemos vivos con la esperanza de ese abrazo de reencuentro.

Te amo y te veo pronto.

Bayar.